domingo, 17 de noviembre de 2013

Iniciándome con agujas de doble punta



La llegada de un bebé es siempre un buen momento para tejer un regalo especial. Hace una semana me invitaron a un babyshower así que pensé que sería una buena ocasión para tejer un regalito y ya de paso aprender algo nuevo. 


Todo este proyecto, exceptuando las tiras y las orejeras, se teje en redondo, así que no hay costuras. Pero es tan pequeñito que no se puede hacer con las agujas circulares y hay que recurrir a las agujas de doble punta. La verdad es que si ya tenemos experiencia tejiendo no resultará más difícil que hacerlo con dos agujas o circulares normales. Se trata de montar los puntos necesarios en una sola aguja y después repartirlos a partes iguales entre tres o cuatro, dependiendo de lo que diga el patrón o más bien si queremos una circunferencia mayor o menor. Con otra aguja libre se van tejiendo los puntos de cada una de las agujas (siempre obtendremos una libre cuando hayamos terminado de tejer todos los puntos de una aguja) como si lo hiciéramos con dos agujas. Al igual que con las circulares hay que tener cuidado de que los puntos no se retuerzan. Mientras vamos tejiendo vamos a ver un montón de puntas sobresaliendo, pero tan sólo hemos de fijarnos en las dos con las que estamos trabajando. Hay que tener en cuenta que cuando se teje en redondo, si hacemos todo al derecho se obtiene punto jersey y para tejer en punto bobo habrá que combinar vueltas en derecho y en revés. Con esto en mente, teniendo ya cierta intuición a la hora de tejer y un proyecto interesante os animo a que os pongáis manos a la obra. 


Mi primera labor con agujas de doble punta ha sido un gorrito con orejeras y un par de manoplas. Como siempre tejer para niños me parece ideal para principiantes porque como son cosas pequeñitas enseguida obtenemos la recompensa de ver nuestra labor terminada. Para este gorrito y estas manoplas no se necesita mucha cantidad de lana, así que es una buena ocasión para terminar con los ovillos que nos van sobrando de otras labores. ¿Que más queréis?, aprendemos algo nuevo, aprovechamos los restos y quedamos fenomenal con un estupendo regalo.


Como siempre en unos días os cuelgo el patrón por si os apetece hacerlo.

domingo, 13 de octubre de 2013

Colorín anaranjado y adiós al frío


Allá por febrero comencé a tejer esta chaqueta para mi pelirrojo (por eso tanto naranja), y no tardé en terminarla, pero tenía que montar las mangas, hacerle un borde y coserle los botones, y esta semana, ocho meses después (ya me vale), la he terminado. Hoy mismo se la he puesto y tengo que decir que es gustosísima y calentita. No pica nada y es pura suavidad. Me han dado ganas de hacer una para cada miembro de mi familia, lástima no tener más tiempo y menos cosas que hacer.

Un guardapuntos
El proyecto lo he sacado de uno de mis libros de cabecera para aprender a tejer (Knitting for Baby), mi gran maestro. Con esta labor te proponen aprender a tejer haciendo rayas de colores, es este casao mezclando tres colores diferentes. No es nada del otro mundo y es divertídisimo buscan lanas que casen y combinen entre sí. Lo más difícil quizás fue tejer el cuerpo de la chaqueta, porque la espalda y los dos frontales han de tejerse por separado. Lo suyo era hacerese con un guardapuntos, pero al ser yo tan novata no supe que podía ser eso. Así que con un poco de ingenio, unas agujas de doble punta que me prestaron y unas pinzas de las de tender me fabriqué mi propio guardapuntos. Si no son demasidos puntos los que guardar con un imperdible de los grandes también se consigue el mismo resultado. 


Las madejas al comenzar
Lo más bonito de trabajar con colores es ver cómo van quedando. Utilicé una lana merina cien por cien sin tratar de John Arbon Textiles que compre en Meadow Yarns, una tienda británica que vende también online. Tienen una selección de lanas bastante amplia y casi todas de tejidos naturales, que a veces cuesta tanto encontrar en España. Esta lana en concreto es muy suave pero de aspecto rústico, de esas que entran ganas de hacerse una mantita para arroparse en ella y olvidarse del frío. 
He disfrutado mucho, y sobre todo aprendido mucho, haciendo esta chaqueta. Hace tiempo que la hice y no recuerdo muy bien cuáles fueron los pasos, pero le echaré un vistazo al libro e intentaré traducirlo y explicarlo para que sea apto para todos en unos días. 


Patrón: 

 La talla que os voy a dar como referencia es la que yo he hecho, 18 meses. Se nota que es un libro americano y la chaqueta da talla, es sobre todo ancha para la fisionomía de mis hijos, que suelen ser altos y delgados, pero hace el apaño. Necesitareis lanas de tres colores distintos. Una de ellas será el color principal y necesitareis el doble que del resto, en mi caso fue el naranja. Está tejida con agujas circulares pero en recto, más que nada porque son bastantes puntos y en unas normales os quedarán muy apretados o no os cabrán. La aguja es del nº 5, para bebés a mí no me gusta usar más gordo que esto. Será de utilidad haceros con un guardapuntos o imperdible grande, pero bien grande. Los guardapuntos los encontrareis en cuaquier tienda especializada en lanas o mercerias grandes por muy poco dinero. Y si no usad vuestra imaginación... Y cuatro botones del color que os vaya. Todo el proyecto se teje en punto bobo, más fácil imposible.

Es importante que organicemos la secuencia de los colores. Empezaremos con el color C, que será el que usemos en el comienzo de la chaqueta por el margen inferior, los puños y el bordecito que tejeremos al final para dejar un acabado perfecto y que no se noten los cambios de color. En el caso de mi chaqueta ha sido el gris marengo. Usaremos este color en las dos primeras vueltas. Seguidamente, en las vueltas 3 y 4 usamos el color A, que será el color principal y del que necesitaremos más lana, en mi caso el naranja. En las dos siguientes vueltas, la 5 y 6, usamos el color B, la lana de color verde en mi chaqueta. En las vueltas 7 y 8, usaremos la lana A. Habrá que repetir esta secuencia durante todo el proyecto. 

Empezamos por la parte de abajo de la chaqueta y montamos 126 puntos con el color C. Tejemos en punto bobo siguiendo la secuencia de colores hasta que la pieza mida 2 cm. En la siguiente vuelta tendremos que hacer el prime ojal para nuestra chaqueta. Tradicionalmente los ojales se sitúan en la parte derecha para las niñas y en la izquierda para los niños. Así que si estaís tejiendo para una niña haremos el ojal al principio de la vuelta, es decir, tejeremos los cuatro primeros puntos, haremos un yarn over  y los siguientes dos puntos los tejemos juntos. Si es para niño esperaremos a que nos queden seis puntos por tejer: tejeremos los dos primeros puntos juntos, echamos la hebra y tejemos los cuatro últimos puntos normal. Tendremos que ir colocando ojales a lo largo de la chaqueta, el segundo cuando tengamos 10 cm tejidos, el segundo a los 19 cm y el cuarto a los 27 cm. Esto, por supuesto, aproximadamente. Lo mejor como siempre usar cada uno su propio criterio. Seguimos tejiendo la chaqueta y cuando llevemos unos 11 cm empezaremos a separar la pieza en tres partes: dos frontales y la espalda.El hueco entre medias es donde irán las mangas de nuestra chaqueta. Para dividir la pieza tejeremos 32 puntos que una vez tejidos pasaremos a un guardapuntos. Simplemente los deslizamos y lo cerramos, así podemos seguir trabajando teniéndolos asegurados. Continuamos tejiendo los sigueintes 62 puntos que serán la espalda. Los restantes 32 puntos los deslizamos a otro guardapuntos. De este modo nos quedamos con la espalda lista para seguir siendo trabajada. Continuamos hasta que el total de la pieza mida 33 cm desde el principio hasta el final y cerramos los puntos.

... continuará...

sábado, 28 de septiembre de 2013

Caja sorpresa de Frau Tulpe


Ayer recibí este bonito paquete, recién llegado de Berlín. Una amiga me pasó el contacto de una maravillosa tienda de telas de Alemania que también vende online, Frau Tulpe. La variedad es excepecional, y los precios, en comparación con los que he visto por Suiza, significativamente más bajos. 

Y es que me he apuntado a "un cose conmigo", que organizan desde el blog caljoanymas. Coseremos un abrigo de porteo, que con el frío que ya se avecina por estas tierras, no nos va a venir nada mal a Teo y a mí. Si alguien se anima, tenéis hasta el 5 de octubre para apuntaros, y Anna os enviará los patrones a partir del 7. Echadle un vistazo a su blog para más detalles. 

La verdad es que tengo un montón de ganas de ponerme con la máquina, que desde que llegamos aquí sólo la he sacado para meterle el bajo a unas cortinas. No he tenido tiempo para más. 

Para el abriguito he elegido dos tipos de tela que nos cuadren con el este clima frío que está por venir. El forro es de polar y para el exterior he escogido una tela de tejido con un 85% de lana. Estoy muy contenta con la elección de los colores: para el forro color verde, y la tela de lana azul petrol precioso. Ya se verá en el resultado final

Mi intención es ir poniendo fotos de los distintos estadios del proyecto para que vayáis viendo cómo va quedando. De momento os dejo con el paquete de Frau Tulpe, que ya así por fuera me ha enamorado.

domingo, 22 de septiembre de 2013

Bufanda de verano




De verano es por dos razones. Por ser muy finita, no muy larga (unos 60 cm) y dejar pasar el aire (ideal para las noches frescas de verano si queremos proteger el cuello); y porque es un proyecto ideal para tejer en verano. Y es que aún recuerdo el día que se me ocurrió llevarme al lago una labor de lana bien gordota, qué sudores, por favor.

Esta bufanda ha sido un regalo para mi madre, que es un tanto calurosa y no la veía yo con una bufanda gorda ni con bajas temperaturas. El proyecto lo he sacado de un librito de la dueña de la tienda Purl en Nueva York (Last Minute Gifts), y la verdad es que me llamó la atención porque con un patrón muy sencillo se obtiene algo muy bonito y exclusivo. El truco está en el tipo de lana, en este caso y en la propuesta de Purl, una mezcla de Mohair Kid con seda. El contrapunto, que es difícil de tejer, porque aunque está tejida principalmente en punto bobo, la hebra es tan finita que no se puede deshacer sin que se enrede. Así que hay que ir con muchísimo cuidado. Os recomiendo que os lancéis a este tipo de labor cuando ya tengáis callo y no falléis con facilidad, sería un auténtico infierno.

Ovillo de Mohair Kid con seda en color rosa baby
Para conseguir el punto tan abierto hay que tejer con unas agujas gruesas. Yo utilicé un cinco pero en el proyecto proponían un seis. No sé si observáis lo finita que es la hebra, poco más que un hilo convencional. Manejar esa hebra tan fina con unas agujas tan gruesas requiere habilidad. La parte más difícil es cuando se va haciendo el dibujo de contraste. Para ello hay que hacer el famoso yarn over, es decir, hacer una lazada y después tejer dos puntos juntos. Con esta lana lleva su tiempo y hay que tener mucho cuidado, porque se escapan los puntos con mucha facilidad.

Si os animáis no es un proyecto que lleve demasiado tiempo, especialmente si ya tenéis experiencia. Aún estáis a tiempo de lucirla en los últimos días del verano, cuando ya refresca un poco más. Además podéis aprovechar los saldos en lana de verano. Para los menos experimentados os aconsejo que compréis la versión sintética, que lleva acrílico en lugar de seda. Así duelen menos los errores en el bolsillo y cuando os sintáis con confianza ya compráis la que lleva seda.

Para tejerla basta con echar de 25 a 30 puntos. Aunque os parezca estrecha al principio luego va echando cuerpo, así que no os sintáis tentados de añadir alguno más o se os hará muy tedioso (lo dice una por experiencia, jijiji). Se tejen cinco filas en punto derecho y en la sexta hacemos el dibujo. Para ello tejemos el primer punto normal y en el siguiente hacemos el yarn over (hacer una lazada y tejer los dos siguientes puntos juntos) hasta llegar al último punto que tejemos normal. De nuevo tejemos cinco filas normal y en la sexta otra vez el yarn over. Después tejemos diez filas en punto derecho y en la 11 hacemos en yarn over. Seguimos así hasta que tengamos el largo deseado (60-80 cm) y finalizamos tal y como empezamos, tejiendo cinco filas y haciendo en la sexta el yarn over. Lo hacemos una vez más (de modo que queden dos filas de dibujo juntas) y cerramos.

Un consejito: ¡paciencia!

La bufanda de verano en proceso

miércoles, 14 de agosto de 2013

Después de todo este tiempo...

Una imagen de nuestro nuevo destino


Muchas cosas han pasado desde mi última entrada que me han impedido actualizar el blog, principalmente porque nos hemos mudado a otro país con todo lo que ello conlleva: mudanza, papeleos, adaptación... No es que haya dejado de tejer, aunque sí que he bajado mucho el ritmo, pero no ha habido tiempo de acercarme por aquí a contaros cómo van mis numerosos proyectos. La verdad es que tengo varias cosas empezadas e inacabadas, y en estos momentos, después de casi dos meses viviendo en un bonito pueblo suizo a 6 km de Zúrich, empiezo a encontrar huequitos para ir acabando lo que he ido empezando.

De momento acabo de terminar algo que empecé por el mes de marzo. Se trata de unas botitas de estar por casa multicolor, regalo de cumpleaños para una sobrina. El patrón lo saqué de una web australiana de lanas, pero tiene errores, así que por eso no voy a poner el link. A pesar de haber tardado mucho tiempo en hacerlo no es un proyecto largo y se acaba bastante rápido. Es por ello ideal para principiantes a los que les apetezca probar con un poquito más de difícultad, ya que nos encontramos con distintos tipos de dismuniciones y aumentos en la misma labor. De momento os dejo con unas fotos del resultado final para ir abriendo boca. En estos días editaré la entrada para colgaros el patrón ya sin errores y en español.


Pinky Princess Girl House Boots... o ¡botitas para estar en casa!


He decidido crear una nueva entrada en lugar de editar la anterior, porque así queda más claro que el patrón se encuentra aquí. Como os comenté este patrón lo saqué de una web australiana pero tenía errores, así que me toco corregirlo sobre la marcha y deshacer algunas cositas. Por suerte no fue tanto como me había propuesto en un principio, y es que una experta tejedora que se cruzó en mi camino me dio las claves para no perder tiempo en vano. Por suerte, no vais a necesitar que os cuente lo que me aconsejó porque yo os voy a dar el patrón ya corregido.


Para realizar estas botas usé una lana de Katia multicolor llamada Totem. Tiene el inconveniente de que es cien por cien acrílico pero ya que van a estar en contacto con el suelo y que las va a usar una niña no es tan mala idea, así se pueden meter en la lavadora sin problemas. La hebra es gordita, y yo concretamente usé unas agujas del 7 para tejerlas. Por eso se trata de un buen proyecto para principiantes aunque entrañe cierta difícultad, y es que se tejen en un abrir y cerrar de ojos.

Se tejen principalmente en punto bobo, pero la suela está en punto jersey. Y es precisamente la suela la que entraña mayor dificultad, porque hay que ir realizando aumentos al derecho y al revés. Pero ya veréis que es facílisimo y una buenísima oportunidad para aprender. Después, cuando llegamos a la punta, hay que ir reduciendo para dar forma a la bota. Aquí hay que hacer dos tipos distintos de reducciones en una misma vuelta, y son esas distintas reducciones las que le dan forma al tejido. Nada es por nada.
Aquí se puede observar el detalle de la suela
Harán falta también un par de botones. Los de la foto son deluxe porque están hechos de nácar nada más y nada menos. Y que se lo cuenten también a mi bolsillo.

Dicho esto, reproduzco el patrón. Happy knitting! como dicen las guiris...

BOTA IZQUIERDA
  • Suela
Empezamos por la suela montando 33 puntos. En la primera vuelta tejeremos todo del derecho. El primero punto se teje normal y en el siguiente hacemos un aumento tejiendo el mismo punto por delante y por detrás. Ya hice una explicación de este aumento en una entrada anterior, pero por si no lo recordáis aquí os enlazo un vídeo (está en inglés, pero se ve claro cómo hay que hacerlo). Después se tejen al derecho los siguientes 13 puntos. Otra vez volvemos a tejer por delante y por detrás el siguiente punto; el próximo punto se teje del derecho. Repetimos una vez más desde el primer aumento todos los pasos hasta que tengamos 37 puntos.

En la segunda vuelta tejeremos todo del revés. Hacemos como en la primera vuelta, el primer punto se teje al revés, incrementamos en el segundo tejiendo por delante y por detrás. Ojo que estamos tejiendo del revés. Se hace de la misma manera que al derecho, sólo que cambia la manera de coger el punto, ya que la aguja de la derecha debe pasar por delante, tal y como hacemos cuando tejemos del revés. Para que no haya confusiones aquí va otro vídeo. Después tejemos del revés los 15 siguientes puntos, volvemos a incrementar otro punto tejiendo del revés por delante y por detrás, tejemos del revés el siguiente. Y vuelta a empezar desde el primer aumento hasta obtener 41 puntos.

Tercera vuelta otra vez del derecho. Como en las demás, se teje el primer punto normal, incrementamos en el segundo por delante y por detrás, tejemos los 17 siguientes puntos, volvemos a incrementar en el siguiente punto, el próximo punto se teje normal y repetimos una vez más desde el primer aumento hasta obtener 45 puntos.

Hacemos una cuarta vuelta al revés repitiendo este patrón. Se trata de incrementar el segundo y penúltimo punto de cada vuelta y los dos que quedan a ambos lados del punto central. Una vez tengamos 49 puntos, tejemos del derecho las siguientes seis vueltas. Desde este momento toda la bota se tejerá en punto bobo.

  • Empeine
A partir de ahora hay que empezar a reducir. Tejemos los dos primeros puntos, deslizamos el tercer punto, tejemos el cuarto y, atención, cogemos el punto anterior, aquel que hemos deslizado y lo pasamos por encima del cuarto que hemos tejido. Si os fijáis estamos cerrando un punto, tal y como hacemos cuando cerramos la labor. Lo que conseguimos en este caso es reducir un punto. Este tipo de reducción se hace cuando se quiere que el tejido se incline hacia el lado izquierdo. Os enlazo otro vídeo de cómo hacerlo aquí. Después se teje normal hasta que queden los cuatro puntos. Los dos primeros se tejen juntos para hacer otra disminución (el tejido se inclina a la derecha) y los dos últimos se tejen normal. Al final tendremos 47 puntos.

Repetimos 11 veces más hasta que nos queden 25 puntos.

  • Tobillo
Echamos 10 puntos y después tejemos los 35 puntos hasta el final. Tejemos cinco vueltas más.

Ahora llegamos a la parte en la que hay que hacer los ojales por donde pasarán los botones. Para ello tejemos normal hasta que nos queden cinco puntos en la aguja izquierda. Entonces tejemos dos puntos juntos y seguidamente hacemos una lazada. Aquí os enlazo otro vídeo para que veais cómo se hace. Los tres últimos puntos se tejen normal.

Se tejen siete vueltas más y acabamos con otra vuelta con ojal. Tejemos otras cinco vueltas normal y cerramos la labor.

BOTA DERECHA
Aquí hacemos igual que con la bota izquierda hasta que llegamos a la parte del tobillo, que es donde cambiará lo que hemos hecho porque la bota abotona al otro lado. Tejeremos primero una vuelta y en la siguiente echaremos 10 puntos para obtener 35 que se tejerán hasta el final.  Después se tejen cuatro vueltas más.

Llegamos a los ojales. Aquí haremos al contrario que en la otra bota. Tejemos los tres primeros puntos, echamos la hebra y tejemos los dos siguientes puntos juntos. Se teje normal hasta el final. Tejemos siete vueltas más y repetimos la vuelta del ojal. Se tejen cinco vueltas más, cerramos y ¿listo?

Pues no, ahora queda cerrar la labor. Lo mejor es empezar por el talón de la suela con una costura normal, como os apetezca, porque no se va a ver. Después empezando por la punta, con una costura invisible, coséis hasta llegar al comienzo del tobillo. Por último cosemos los dos botones de manera que coincidan con los ojales, y ahora sí, ¡listo!

Cualquier cosilla comentad,  que se me puede haber pasado algo por alto.

Por cierto, la talla que he reproducido aquí vale para niños de entre 3 y 6 años. Ya sabéis que como el punto cede, puede servirles durante mucho tiempo. ¡Que os guste!





viernes, 22 de marzo de 2013

Adivina adivinanza, ¿qué estoy tejiendo?

Estoy con mil cosas a la vez. Hace tiempo que compré esa lana tan multicolor para hacerle los famosos calentadores a una de mis sobrinas. Pero aquel proyecto tan estimulante para principiantes ya no me llama la atención. Ahora me llaman más los retos. Así que hace unos días cayó en mis redes sociales un bonito patrón, y enseguida pensé en esta lana aparcada en mi rincón de punto.

Me parece a mí que se me está quedando un pelín grande. Pero tratándose de niños no es un problema. Más bien al contrario.

Una pista... es para los pies. Cuando tenga un poquitín más hecho os cuelgo el patrón. Próximamente en el blog.

Inciso: aunque haya dicho que es un reto no es nada difícil de hacer.

jueves, 21 de marzo de 2013

Knitting on board

Nos hemos venido a Zürich estos días, para conocerlo e ir familiarizándonos con el que será nuestro nuevo hogar. Con todos los preparativos no tengo mucho tiempo para escribir entradas, pero siempre encuentro huecos para tejer.

La chaqueta de Teo está casi terminada. Me falta unir una manga, hacerle un ribete todo alrededor y ponerle los botones, que ya están comprados.

La foto que he colgado es de un nuevo proyecto en el que estoy inmersa y que he comenzado con una amiga. Se trata de un jersey primaveral, ya ireis viéndolo. Estamos haciendo un "knit along". Se trata de empezar al mismo tiempo e ir más o menos a la par. Los resultados prometen porque cada una hemos escogido lanas y colores diferentes (ella de algodón y yo merino, ella gris azulado y color crudo, yo gris perlado y melocotón) . Aun tratándose del mismo jersey el resultado final será muy distinto.

Y bueno, pues aquí en Zürich intentaré sacar huequitos para tejer. En el avión pude terminar una hilera, tenía al enano encima y no di para más.

Que paséis buena Semana Santa.

domingo, 17 de marzo de 2013

Cosiendo II

Estas semanas estoy mono temática con la costura. Y no es que haya dejado de tejer, para nada, pero como he estado haciendo un taller de iniciación a la costura quiero enseñaros los resultados. Esta semana tocaba hacer un proyectito que nosotras quisiésemos y yo elegí uno de un libro que tengo que mezcla costura y patchwork, Zakka Style, de Stash Books. En concreto se trata de este costurero de viaje. Viene acompañado de alfiletero a juego.


Las telas las cogí del taller, excepto la naranja que veis al fondo que es mía. El bies de los bolsillos es de la misma tela que lleva el alfiletero. Así queda en abierto, y así cerrado.


Lleva un cierre al estilo peSeta, una goma elástica alrededor.

¿Os gusta?

(Por cierto, el bolsito de la semana pasada ya está terminado. Voy a actualizar la entrada con una foto del resultado final).

domingo, 10 de marzo de 2013

Cosiendo

 Hace dos semanas que empecé un taller de iniciación a la costura en peSeta y en la foto os muestro el primer resultado. Aún habrá algo más. Ayer aprendimos a hacer este bolsito que intercala cuatro telas diferentes. Fue toda una labor elegir las telas adecuadas, pero valió la pena porque me quedé muy satisfecha con el resultado.
Esta es la parte de detrás
Y así por dentro
Aún me falta cerrar (no sé si habéis apreciado los alfileres) y colocarle una cinta para colgar. A mi hijo Pau le ha gustado, pero ha destacado que éste es muy de "chica", así que le he prometido uno más acorde a sus gustos para que guarde sus juguetes cuando se los lleva a la calle. Prometo hacer un paso a paso por si os animáis también con el hilo y la aguja (y la máquina de coser).

Y poco más. El punto no lo tengo para nada abandonado. Llevo semanas dedicándole mis pocos ratos libres a una chaquetita que estoy haciendo para el pequeño. Ya sólo me queda una manga así que espero que en breve pueda mostraros los resultados.

El bolsito terminado


miércoles, 27 de febrero de 2013

Patuquitos para un recién nacido



Ahora que sé que ya le han llegado a la agraciada mamá, ya puedo hablaros de ellos. Este es otro proyectito que tuve entre manos hace unas semanas. El patrón lo saqué de otro maravilloso libro donde te enseñan a tejer realizando proyectos para bebés. Empieza con cositas muy simples y el nivel de dificultad se va incrementando en cada proyecto.


 La parte más "entretenida" del proyecto fue hacer los agujeritos para pasar el cordón. Aquí aprendí una nueva técnica que en inglés se llama yarn over. Me imagino que en español será algo así como "echar la hebra". Consiste en tejer dos puntos juntos y justo después echar la hebra sobre la aguja derecha como para hacer un nuevo punto. Los siguientes puntos se tejen normalmente. En la siguiente hilera se tejen todos los puntos, teniendo cuidado cuando lleguemos al que hemos echado de que no se nos escape. De este modo queda un agujerito, que en este caso servía para insertar el cordón, y en otros para hacer ojales.



Para hacer estos patuquitos utilicé una lana merino de Katia, superwash, que ya sabemos que los niños se manchan mucho. Es una lana suavísima, y el punto bobo le da un toque mullido irresistible. Quise haber tejido yo misma el cordón, pero se me quedaba un tanto gordo y me dio mucha pereza, así que al final opté por usar una cinta de raso. Como no sabíamos si iba a ser niño o niña elegí unos colores unisex. Al final resultó ser un nene. ¡Bienvenido Axel!

sábado, 23 de febrero de 2013

Cobertor de lana

 
Como lo prometido es deuda, aquí va el patrón para hacer un cobertor de lana como el de la foto. Yo lo saqué de Ottobre Designs. Pero cuando fui a hacerlo resultó que la lana que yo había escogido era más fina, de tal modo que si seguía ese patrón se me iba a quedar más pequeño. Así que me inscribí en Ravelry e intenté buscar otro, con la gran suerte de que encontré precisamente una adaptación del mismo patrón pero con tallas diferentes (desde recién nacido a talla XL) y usando una lana más finita, así que la que yo había comprado me servía.

Si pincháis sobre el link de Ravelry, encontrareis un enlace al patrón. Pero para los que no sepan inglés aquí va mi versión talla mediana.

Está cosido a dos agujas de tamaño 3,5 y 4. Usé lana 100%. Se empieza por la cinturilla del culete y se acaba por la delantera.

Usando el tamaño de aguja menor se montan 64 puntos y se teje la cinturilla en punto elástico (d1, r1 en la misma línea). Para los que se inicien: para poder hacer bien este tipo de punto cuando se teje el punto derecho la hebra va por detrás de las agujas; una vez tejido el punto derecho, pasamos la hebra por delante de las agujas y tejemos el siguiente punto al revés. Como los puntos son pares la segunda y sucesivas hileras se empiezan de nuevo por derecho y se acabarán por revés. La cinturilla se teje de este modo hasta que mida unos 5 cm. Es importante que tanta la cinturilla de delante como la de detrás midan exactamente igual, así que si contáis cuantas vueltas habéis dado, mejor.

Una vez tejida la cinturilla pasamos al cuerpo trasero del cobertor. Para ello cambiamos a las agujas más grandes. Se teje en punto bobo (todo del derecho) unos 10 cm. Un truco que nos dan en Ravelry es que para hacernos más fácil la unión del pañal no se teja el primer punto de cada fila deslizándolo a la otra aguja como si lo fuéramos a tejer del revés.

A partir de aquí empezamos a descender para hacer el tiro. Para ello tejeremos dos puntos juntos dos veces (es decir, de los cuatro primeros puntos sólo sacaremos dos). Después tejeremos el resto de manera normal hasta que nos queden cuatro puntos. Estos últimos cuatro puntos se tejen de dos en dos para hacer otra disminución. Se repiten estos pasos en todas las filas hasta que sólo queden 17 puntos.

Después tejemos normal (sin disminuir) hasta que hayamos conseguido unos 3,75 cm. A partir de aquí empezamos a aumentar. Desde la fila 1 a la 3, el primer punto lo tejemos por delante y por detrás, de manera que de un solo punto sacamos dos. Para hacer esto hay que tejer el punto como normalmente, pero no deslizamos el punto antiguo sino que volvemos a insertar la aguja derecha por la parte de atrás del punto y lo tejemos. Esta vez sí que deslizamos el punto. Una vez hecho esto con el primer punto, tejemos del derecho el resto hasta llegar al último, que volvemos a tejer por delante y por detrás. Se hace esto hasta que tengamos 23 puntos. En la línea 4 tejemos los dos primeros puntos por delante y por detrás (de dos puntos sacamos cuatro), tejemos del derecho el resto y al llegar a los dos últimos volvemos a tejerlos por delante y por detrás (de manera que sacamos cuatro). Se repiten estos pasos hasta que tengamos 27 puntos.

Los incrementos finales los haremos de la siguiente manera: en la fila 1 tejemos por delante y por detrás los dos primeros puntos, tejemos del derecho hasta llegar a los dos últimos que se vuelven a coser por delante y por detrás. Una vez hecho esto se montan 5 puntos de manera simple (es decir, usando sólo la hebra y no dos como hacemos al principio). De este modo tenemos un total de 42 puntos. En la siguiente fila tejemos todos los puntos y al llegar al final montamos otros cinco puntos. Ahora habrá 47 puntos.

Ahora habremos llegado a la parte delantera del cuerpo del pañal. Recordad que el primer punto se desliza como si lo fuéramos a tejer del revés. Se teje del derecho hasta que mida 10 cm o lo que mida la parte de atrás. Al ser punto bobo es muy fácil contar las filas: cada rayita equivale a dos filas. Así ya sabéis cuánto hay que tejer. Hay que tener en cuenta que la cinturilla debería empezar con una fila del revés. Eso lo sabéis porque cuando vais a tejer los puntos encaráis la parte del revés y las filas que se tejen son las pares. Si tenéis dudas de cuál es el revés (cuando hacemos punto bobo ambas partes son iguales), fijaos en la hebra que os sobra cuando montasteis los puntos al principio, si cuando vayáis a empezar una fila nueva está del lado de las puntas de las agujas, es una fila impar y por tanto encaráis el derecho; si se encuentra del lado del final de las agujas, es una fila par y estareis encarando la parte interior. Todo esto viene porque debéis acabar el cuerpo delantero con una fila impar. De este modo si habéis ido contando filas nunca os coincidirán, así que lo mejor es que tejáis una fila menos y que la parte de delante sea un poquito más corta que la trasera.

De nuevo volvemos a la cinturilla, y para ello cambiamos a las agujas más pequeñas. Tejemos de nuevo en punto elástico hasta que esta cinturilla mida igual que la otra. Cerramos los puntos, a ser posible del mismo modo en que nos encontramos los puntos (los del derecho los tejemos del derecho y los del revés del revés).

Y llega el momento de las puños para las piernas: del interior del tiro sacamos 46 puntos y lo tejemos en punto elástico hasta que mida unos 4 o 5 cm.

Para acabar cosemos las costuras y ya tenemos nuestro cobertor hecho. Recordad que si vais a usarlo sobre un pañal de tela primero hay que lanolinizarlo. Aquí en esta web os dicen cómo.





jueves, 14 de febrero de 2013

Mi máquina de coser

Hoy por fin me ha llegado MI máquina de coser, y digo "mi" porque hasta hace poco usaba la de mi madre. Como vivimos al lado siempre que necesitaba coser algo se la pedía. Como en unos meses nos iremos a vivir a Zurich, eso ya no será posible. Así que me puse a hacer una búsqueda por Internet y al final me he comprado una Alfa Next 40. Al principio estuve dudando entre esa y la 30, que es un poquito inferior y más económica, pero encontré una web donde no era tanta la diferencia y, ¡qué narices! no creo que vaya a comprarme ninguna más. Mi hijo lo primero que ha dicho cuando la ha visto ha sido: "¡Anda! Si es morada, como tu color favorito". Y sí, no podría gustarme más. Así, por fuera, tiene un diseño muy bonito.

Tengo un librito que me compré hace poco que es maravilloso. Y lo primero que voy a hacer son unos baberitos bandanas para el pequeño, que está con las muelas y se pasa la vida babeando.

El maravilloso libro de Lotta





Ay, no sé si me dará tiempo a todo...

miércoles, 13 de febrero de 2013

Pasión por la tela

Una de mis pasiones son los pañales de tela. Ya estando embarazada del mayor me puse a investigar después de ver una montaña literal de pañales desechables usados en casa de mis cuñados. Fue sobrecogedor, y más al saber que no son biodegradables y no pueden reciclarse. Así que busqué información, y la verdad es que hay tanta que uno no sabe muy bien por dónde empezar, pero seguí en mi empeño, y antes de que naciera el bebé, ya me había hecho con unos pañalitos de tela para empezar.

Al principio eran tan pocos que teníamos que usar desechables también, pero poco a poco fui aumentando mi stash y cada vez usábamos más la tela. Los usamos aproximadamente un año. Empecé a tener fugas y decidí no continuar. Al menos evitamos ensuciar el mundo durante algún tiempo.

Cuando me quedé embarazada del pequeño decidí darles una segunda oportunidad. Además, esta vez ya contaba con suficientes pañales y más experiencia. Compramos una secadora para facilitarnos el secado y me uní a un grupo de "pañaleras" en Facebook. Así, aprendimos aún más sobre los pañales de tela. Y una vez hubo nacido mi pequeño, después de tres semanas de vida, cuando ya hubo echado todo el meconio y no hacen una caca detrás de otra, empezamos a usar pañales de tela en exclusiva. ¡Y seguimos!

Todo mi stash en diciembre de 2012 (ahora hay alguno más, jejeje)


Otra de mis pasiones por la tela son los fulares. A mis dos hijos les he porteado desde su nacimiento. Al primero por necesidad (vivíamos en el centro de Madrid en un tercero sin ascensor, rodeados de paradas de metro antiguas no aptas para carritos) y al segundo por gusto y por cuestiones prácticas. Un fular o una bandolera solucionan muchas situaciones difíciles cuando hay que atender a dos niños.

¡Y con tanto gusto!
Y la tercera pasión que ha entrado en mi vida ha sido la lana. ¡Quién lo hubiera dicho! Alguna vez en mi infancia intenté que mi abuela me enseñase pero nunca lo logré. Mi abuela no tenía paciencia y me hizo creer que no valía para ello. Así que no las tenía yo todas conmigo cuando empecé, pero aquí estoy, haciendo cada vez cosas más complicadas, siendo capaz de entender patrones con cierto grado de dificultad... ¡todo es ponerse!

La lana también entro en mi vida a través de los pañales de tela. Fue todo un descubrimiento comprobar como un pañal cubierto por un cobertor de lana no cala y además hace que la piel del bebé transpire. Curiosamente es de lo mejorcito para el verano: pañal de tela y cobertor de lana = fresquito. Soy una fan total de este tipo de cobertores.
Cobertores de lana para pañales de tela

Otro día os enseñaré cómo hacer un cobertor de lana (el rojo que aparece en la foto está hecho por mí). Incluso si no usáis pañales de tela, siempre pueden usarse en primavera u otoño como pantaloncito, o como braguita para poner encima de un pañal desechable por debajo de un vestido o falda, en el caso de las niñas.

lunes, 11 de febrero de 2013

Otras cosas con las cual empezar



Aquí os dejo nuevas ideas para iniciarse en el punto. Como siempre se trata de labores que se terminan más o menos rápido, para no desesperarnos. Yo, personalmente, en mis comienzos me pasaba mucho tiempo deshaciendo, porque me equivocaba muchísimo. Así que si nos ponemos una labor que nos exija, vamos a acabar abandonando.

Una de mis primeras labores fueron unos cuellos para mis dos hijos. Al contrario que las bufandas se termina rápido de tejer y es una buena manera de poner en practica nuestras habilidades. Y de cara al frío, y para niños, son estupendos. No se desatan, se quedan fijos en su sitio, no van colgando. Al mayor le hice una con una lana jaspeada de tonos marrones que le fuera más o menos a juego con un gorro de león súper divertido que tiene. Para el pequeño usé una lana que me regalaron. El problema es que pica un poco, y para un cuello no es la más adecuada. Si puede ser, usad acrílico o merino, que no pica y os evitáis problemas con ellos.

La verdad es que se tejen como una bufanda, sólo que se termina antes.  A la marrón le hice rayitas a punto bobo para adornarla un poco. También podéis intercalar franjas en punto bobo y otras a punto jersey para ir dándole textura al proyecto. O si os animáis con el elástico, un elástico doble (2d, 2r en la misma hilera) seguro que queda fenomenal.

Si os queréis animar con las agujas circulares, os evitareis tener que coser la costura al final, y creo que es una buena forma de iniciarse con ellas.


sábado, 9 de febrero de 2013

Preparando el carnaval

Esta semana he recuperado la máquina de coser. Aún soy muy novatilla, pero esto, como todo, es lanzarse a la piscina. El próximo martes celebran el carnaval en el cole de mi hijo mayor, y este año el tema es Europa. La verdad es que la temática no podía ser más ambigua y abierta, de hecho estuve esperando a ver si las profes de infantil se ponían de acuerdo en cerrar un poquito más el tema y darnos más pistas a la hora de buscar disfraz. Pero no ha sido así y me he visto a una semana de la fiesta y sin tener ni idea de qué disfrazarlo.

Tenemos unos delantales monísimos de peSeta que nos regalaron a cambio de una sesión de fotos con el bellezón de mi hijo. Así que se me ocurrió que podríamos aprovecharlo y lucirlo en la fiesta disfrazándolo de pizzero-cocinero italiano. Más o menos tenemos todo el attrezo (camiseta a rayas, delantal, rodillo...), pero me faltaba el gorro de cocinero. Así que busqué por Internet un tutorial y he aquí lo que ha salido:

El motivo con la banderita es cosecha mía, para que se relacione bien con el tema de Europa del cole. Esta hecha con fieltro (para que no se deshilache) y está puesta con velcro de pegar, que andaba ya cansada de coser.

El martes colgaré alguna foto del Carnaval, ya con el disfraz al completo. Y así veis que bonitos los delantales de peSeta.

Os dejo con unas fotillos de mi paso a paso.

Las telas que he usado ya cortadas

Uniendo la franja de la cabeza
La parte superior

Las dos partes unidas













Y la esperada foto del Carnaval:

martes, 5 de febrero de 2013

Primeras cositas

Puedo decir que he aprendido a tejer haciendo y deshaciendo una y otra vez (he de ahí el nombre del blog), prueba y error, como se suele decir. Con eso y mirando vídeos y tutoriales en Internet empecé a tejer más allá de 10 hileras sin cometer demasiados errores. Pero como siempre, el poder tener a alguien como guía facilita mucho las cosas. Y fue así que un fin de semana que pasamos en Valencia me enteré de un taller que hacían en una tiendita muy chula del barrio de Ruzafa, Nanufacture. Resulta que una de las chicas de Enganchilladas, Rocío, venía a dar un taller de punto donde nos enseñarían a hacer calentadores para nuestros bebés. Era un taller de un par de horas donde nos enseñaban a poner en práctica lo más básico haciendo una labor sencillita pero muy gratificante. En mi caso aprendí a hacer punto elástico o ribbing y cerrar puntos, que aún no sabía. También me fijé en cómo la profe corregía nuestros errores con una aguja de ganchillo, que se convertiría en mi gran aliada a partir de entonces. Salí de allí con un calentador solamente. Después me tocaba a mí continuar con el siguiente. Fue mi primera labor terminada, y como tal merecía una entrada.

Para los que aún se estén iniciando y quieran aprender, se trata de una buena labor por la cual empezar. Generalmente, la gente empieza tejiendo bufandas, pero puede hacerse una labor muy tediosa y aburrida que además lleva tiempo, así que también es fácil abandonar y como consecuencia dejar de hacer punto para siempre.

Os cuento cómo se hacen estos calentadores. Están tejidos a dos agujas. La lana nos la proporcionaron en el taller, y se trata de un ovillo que combina dos hebras de distintos colores. Esto es algo que hay que hacer de manera manual, pero si no os apetece siempre se puede comprar una lana jaspeada con distintos tonos. También queda fenomenal. Aquí use agujas de 7 mm. Para empezar mejor gorditas, pues se acaba antes y uno ve antes los resultados. Se montan entre 20 y 30 puntos, dependiendo del tamaño de la piernita del bebé. Se empieza con punto elástico: uno del derecho y otro del revés combinados en la misma hilera. Es muy importante que tengáis en cuenta que en la siguiente hilera, si los puntos son pares, se empieza otra vez con el derecho y el segundo revés. Pero si son impares, en ese caso se empezará con revés y el segundo punto será derecho. Lo cuento porque ya me ha pasado que en vez de hacer elástico salía punto de arroz. Se hacen cuatro hileras de elástico. A partir de aquí se empieza con punto jersey (una hilera del derecho otra del revés). Al llegar a la hilera nº 4 (que tocaría del revés) se hace del derecho, y así se consigue el dibujito que veis en las fotos. La hilera nº 5 se vuelve a hacer del derecho y ya la 6 del revés. Se continúa así el largo que se quiera. A mí, como en el taller se nos acababa el tiempo, no pude hacer más que lo que veis. Se termina otra vez con punto elástico hasta completar cuatro hileras y se cierran los puntos. Si dejáis una colita de unos 20 cm al montar o al cerrar los puntos podéis usarla para coser la costura y hacer el calentador.
La "continuación" ya en casa.

lunes, 4 de febrero de 2013

Los comienzos...

El día de mi cumpleaños recibí un regalo muy especial de una amiga: dos agujas de tejer y dos ovillos de lana. Junto con el regalo recibí una lección de punto básico: montar puntos, tejer al derecho y tejer al revés. Me fui con una breve muestra a partir de la cual yo debía seguir para practicar. Al día siguiente, ya en mi casa, me levanté por la mañana dispuesta a continuar con la labor... pero la tarea se me hacía imposible. Así que destejí lo que había hecho el día anterior y viendo vídeos y tutoriales aquí y allá en Internet, comencé a tejer. Y aquí me hallo, inmersa en mil proyectos, deseando empezar y aprender cosas nuevas y mostrar un poquito de lo que me mueve.

Aquellos dos ovillos han dado paso a todo esto.